lunes, 3 de octubre de 2011

Había una vez un pueblo en el que no pagaba nadie

Jorge Ramos
Había una vez, hace muchos, muchos años, un pueblo en  el que todos los vecinos tenían deudas unos con otros porque ninguno pagaba sus facturas. Había una ley contra la morosidad que nadie cumplía. Un  buen día llegó al hotel del pueblo un millonario que pidió habitación. Mientras que subía a ver la habitación dejó sobre el mostrador un billete de 500 € . El director del hotel, miró el billete y pensó “pagaré con este billete la deuda que tengo con mi proveedor de comida. El proveedor recibió el billete y con él pagó al ganadero que le suministraba la carne, quien a su vez pagó con el mismo billete a la empresa que le suministraba el pienso, empresa que utilizó el billete para pagar a su agencia de transporte. El dueño de la agencia  de transporte pagó con este billete a la madame del prostíbulo del pueblo, y la madame pagó con el billete al dueño del hotel por el alojamiento de sus chicas. El hotelero recibió el billete de la madame, en ese mismo momento bajó el millonario y le dijo “me marcho, no me gusta la habitación”. El dueño del hotel devolvió el billete al millonario quien montó en  su coche y se marchó del pueblo. Curiosamente, el billete también se marchó del  pueblo en el bolsillo del millonario pero ya no había nadie endeudado en el pueblo.  Aquel millonario era un banquero, lamentablemente ahora los banqueros ya no viajan hasta pequeños pueblos para mirar si les interesa una habitación.
   Ahora todos los partidos políticos se rasgan las vestiduras, y  después de muchos años tolerando la morosidad  se echan la culpa unos a otros. Los nuevos Gobiernos responsabilizan a los antiguos, los antiguos a los nuevos, pero todavía no he conocido a ningún Gobierno de ningún partido político que en los últimos 20 años haya querido, haya sabido ó haya podido terminar con el problema de la morosidad y este problema lo han venido pagando y lo siguen pagando todavía los autónomos, las micropymes y las pymes.  ¿Estarán esperando nuestros representantes políticos a que venga ese millonario a reservar una habitación en nuestro pueblo?

1 comentario:

  1. Cuidado, mucho cuidado, con aquellos que llegan al pueblo comprando y vendiendo burros a unos precios muy por encima de los precios del mercado. Durante los últimos años la euforia del euro nos ha animado a comprar demasiado burros a demasiado precio,y así estamos ahora todos los países de endeudados ¿qué hacemos ahora?

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